La Guardia Civil detiene en Cantabria a dos personas por la decapitación de dos perros y presuntas amenazas

En el marco de la operación denominada HEADDOG, el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil ha arrestado a dos varones de 64 y 18 años como presuntos responsables de maltrato animal con resultado de muerte, así como de delitos de amenazas y daños relacionados con la decapitación de dos perros cuyos restos fueron hallados en Corvera de Toranzo y Santander

La Guardia Civil ha culminado con éxito una compleja investigación sobre un grave caso de maltrato animal en Cantabria, que ha culminado con la detención de dos hombres, de 64 y 18 años, como presuntos autores de la decapitación de dos perros y de delitos asociados de amenazas y daños materiales.

La operación, desarrollada bajo el nombre HEADDOG, fue coordinada por el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) tras recibir información de sucesos ocurridos en diferentes puntos de la región. 

Los primeros indicios de los hechos se remontan al pasado mes de abril, cuando agentes del SEPRONA fueron alertados del hallazgo del cuerpo decapitado de un perro en el municipio de Corvera de Toranzo.

Muy cerca de esa ubicación, también se encontró la cabeza de otro perro, lo que llamó de inmediato la atención de los investigadores por la brutalidad de los hechos. 

Paralelamente, en la ciudad de Santander se detectó otra escena relacionada: en el interior de una furgoneta con el cristal fracturado, se localizó el cuerpo sin vida de un perro al que le faltaba la cabeza.

En Corvera de Toranzo, la cabeza del segundo animal fue encontrada dentro de una bolsa colgada en la portilla de una finca particular, propiedad de una persona que, según las pesquisas, había recibido amenazas vinculadas a estos hechos. 

Durante la investigación, los agentes pudieron establecer que estos hechos no solo constituían maltrato animal, sino que también formaban parte de un contexto mayor de intimidación hacia el propietario de la finca donde se colocó uno de los restos.

Asimismo, se descartó que los perros hallados tuvieran relación con denuncias de desaparición que se habían viralizado en redes sociales en fechas próximas, ya que estas comunicaciones no estaban conectadas directamente con las amenazas investigadas. 

A través de análisis forenses, identificación de vehículos y trabajo de campo, la Guardia Civil logró identificar a los presuntos autores de los hechos y, a finales de noviembre, procedió a su detención.

A los arrestados se les imputan delitos de maltrato animal con resultado de muerte, amenazas continuadas y daños, por los que ahora deberán responder ante la justicia. 

La Guardia Civil continúa su labor para esclarecer las motivaciones detrás de este caso y recuerda el compromiso institucional con la protección de los animales y la persecución de conductas que atenten contra la integridad y el bienestar de seres vivos.  


Loading