Los jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN se han reunido este viernes para valorar la situación en Ucrania tras el ataque y posterior invasión por parte de Rusia y cuáles deben ser los siguientes pasos desde la Alianza Atlántica.
Tras la reunión de urgencia, que se ha celebrado de urgencia por videoconferencia, Jens Stoltenberg ha anunciado que se ha decidido desplegar por primera vez las Fuerzas de Respuesta Rápida para aumentar la defensa de los países aliados a pesar de que en los últimos días se había aumentado la presencia en los países fronterizos y los bálticos, como Bulgaria, Rumanía, Polonia, Estonia, Letonia y Lituania.
En concreto, el secretario general de la OTAN ha señalado que el despliegue será por tierra, mar y aire y su objetivo será responder a «cualquier contingencia», por lo que el operativo comenzará en los próximos días en estados cercanos a Ucrania, aunque no se ha especificado en qué consistirá ni se han precisado más detalles.
No obstante, en la actualidad las Fuerzas de Respuesta Rápida se componen de hasta 40.000 efectivos de Estados Unidos y de Europa que están preparados para desplegarse en cualquier en cinco días, con autonomía de hasta un mes.
«Este es un momento histórico y la primera vez que la Alianza emplea estas fuerzas de alta disponibilidad en un papel de disuasión y defensa.