Durante su discurso en la Asamblea General de Naciones Unidas, el presidente de EE. UU. advirtió que reconocer un Estado palestino sería un incentivo al terrorismo y urgió a liberar a los rehenes en Gaza.
En su intervención ante la Asamblea General de la ONU, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, protagonizó un discurso enérgico en el que se manifestó en contra de los recientes movimientos internacionales que reconocen el Estado de Palestina.
Trump calificó estas acciones como un “premio” al grupo Hamás, al considerar que recompensan lo que él describió como actos violentos por parte de la organización islamista.
El mandatario además instó al inmediato fin del conflicto en Gaza, y exigió la liberación tanto de los rehenes todavía retenidos como de los desaparecidos.
Según él, tales decisiones diplomáticas unilaterales distraen de lo que considera fundamentales: seguridad para Israel y justicia para las víctimas.
Trump también acusó a la Organización de las Naciones Unidas de no cumplir con su papel esperado, afirmando que muchas instituciones globales se han visto “deterioradas” y que su acción no ha estado al nivel de los retos actuales.
En contraste con la postura estadounidense, varios países, incluidos Reino Unido, Canadá, Australia, Portugal y Francia, entre otros, han expresado su respaldo al reconocimiento del Estado palestino, ya sea directo o mediante procedimientos diplomáticos en la ONU.