La creciente dependencia de renovables sin suficiente almacenamiento ni respaldo firme podría provocar nuevos cortes de suministro eléctrico, según advierten analistas del sector energético.
En los últimos meses, diversos expertos y organismos internacionales han advertido que España se encuentra en una situación de vulnerabilidad energética que podría derivar en nuevos apagones si no se refuerza la red eléctrica a tiempo.
El cierre escalonado de centrales nucleares previsto para los próximos años, junto con la creciente dependencia de energías renovables como la solar y la eólica que aportan menos estabilidad al sistema, está reduciendo la capacidad de respuesta ante picos de demanda y fallos imprevistos.
A esta realidad se suma la escasa interconexión con el resto de Europa, lo que limita la posibilidad de importar energía de países vecinos en caso de emergencia.
Aunque el Gobierno ha aprobado un decreto para impulsar nuevas inversiones en almacenamiento, ampliar la potencia de respaldo y facilitar la participación de tecnologías renovables en la estabilización de la red, los expertos subrayan que estas medidas no tendrán un impacto inmediato y que es fundamental acelerar los proyectos de baterías, reforzar las interconexiones y garantizar el mantenimiento de centrales de respaldo.
De no tomarse decisiones urgentes, España podría experimentar cortes de suministro especialmente en periodos de alta demanda, como olas de calor o episodios de baja generación renovable, con consecuencias directas para hogares, empresas e industrias estratégicas.
